Este Post contiene Versículos de la Biblia para Niños que hablan sobre La Obediencia. Textos Bíblicos de Nueva Versión Internacional NVI.
El hijo sabio es la alegría de su padre; el hijo necio es el pesar de su madre. (Proverbios 10:1)
Instruye al niño en el camino correcto, y aun en su vejez no lo abandonará. (Proverbios 22:6)
La vara de la disciplina imparte sabiduría, pero el hijo malcriado vergüenza a su madre. (Proverbios 29:15)
Hijo mío, no te olvides de mis enseñanzas; más bien, guarda en tu corazón mis mandamientos. Porque prolongarán tu vida muchos años y te traerán prosperidad. (Proverbios 3:1-2)
Que nunca te abandonen el amor y la verdad: llévalos siempre alrededor de tu cuello y escríbelos en el libro de tu corazón. Contarás con el favor de Dios y tendrás buena fama entre la gente. (Proverbios 3:3-4)
Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él allanará tus sendas. (Proverbios 3:5-6)
No corregir al hijo es no quererlo; amarlo es disciplinarlo. (Proverbios 13:24)
Lo que soportan es para su disciplina, pues Dios los está tratando como a hijos. ¿Qué hijo hay a quien el padre no disciplina?. (Hebreos 12:7)
Hijos, obedezcan en el Señor a sus padres, porque esto es justo. (Efesios 6:1)
Honra a tu padre y a tu madre que es el primer mandamiento con promesa. (Efesios 6:2)
El que mate a su padre o a su madre será condenado a muerte. (Éxodo 21:15)
Al que maldiga a su padre y a su madre, su lámpara se le apagará en la más densa oscuridad. (Proverbios 20:20)
Reconoce en tu corazón que, así como un padre disciplina a su hijo, también el Señor tu Dios te disciplina a ti. (Deuteronomio 8:5)
Honra a tu padre y a tu madre, para que disfrutes de una larga vida en la tierra que te da el Señor tu Dios. (Éxodo 20:12)
La necedad es parte del corazón juvenil, pero la vara de la disciplina la corrige. (Proverbios 22:15)
Tendrán presentes todos mis mandamientos, y los pondrán por obra. Así serán mi pueblo consagrado. (Números 15:40)
Hijos, obedezcan a sus padres en todo, porque esto agrada al Señor. (Colosenses 3:20)
Los preceptos del Señor son rectos: traen alegría al corazón. El mandamiento del Señor es claro: da luz a los ojos. (Salmos 19:8)
Obedezcan mis mandamientos y pónganlos por obra. (Levítico 22:31)
Si realmente escuchas al Señor tu Dios, y cumples fielmente todos estos mandamientos que hoy te ordeno, el Señor tu Dios te pondrá por encima de todas las naciones de la tierra. (Deuteronomio 28:1)
Dichosos los que guardan sus estatutos y de todo corazón lo buscan. (Salmos 119:2)
Pero el Señor le dijo a Samuel: No te dejes impresionar por su apariencia ni por su estatura, pues yo lo he rechazado. La gente se fija en las apariencias, pero yo me fijo en el corazón. (1 Samuel 16:7)
Si ustedes me aman, obedecerán mis mandamientos. (Juan 14:15)
El que me ama, obedecerá mi palabra, y mi Padre lo amará, y haremos nuestra morada en él. (Juan 14:23)
Recita siempre el libro de la ley y medita en él de día y de noche; cumple con cuidado todo lo que en él está escrito. Así prosperarás y tendrás éxito. (Josué 1:8)