30 Versículos Bíblicos de Animo

Este articulo contiene Versículos Bíblicos que hablan sobre Animo y Fortaleza. Textos de la Biblia de Nueva Versión Internacional NVI.
Versículos de Animo para Mujeres, Hombres y Jóvenes
Yo estoy contigo. Te protegeré por dondequiera que vayas, y te traeré de vuelta a esta tierra. No te abandonaré hasta cumplir con todo lo que te he prometido.
Génesis 28:15
Ya te lo he ordenado: ¡Sé fuerte y valiente! ¡No tengas miedo ni te desanimes! Porque el Señor tu Dios te acompañará dondequiera que vayas.
Josué 1:9
Cuando salgas a pelear contra tus enemigos y veas un ejército superior al tuyo, con muchos caballos y carros de guerra, no les temas, porque el Señor tu Dios, que te sacó de Egipto, estará contigo.
Deuteronomio 20:1
El Señor mismo marchará al frente de ti y estará contigo; nunca te dejará ni te abandonará. No temas ni te desanimes.
Deuteronomio 31:8
Aun si voy por valles tenebrosos, no temo peligro alguno porque tú estás a mi lado; tu vara de pastor me reconforta.
Salmos 23:4
El Señor es mi luz y mi salvación; ¿a quién temeré? El Señor es el baluarte de mi vida; ¿quién podrá amedrentarme?
Salmos 27:1
Cobren ánimo y ármense de valor, todos los que en el Señor esperan.
Salmos 31:24
Yo te instruiré, yo te mostraré el camino que debes seguir; yo te daré consejos y velaré por ti.
Salmos 32:8
El Señor Todopoderoso está con nosotros; nuestro refugio es el Dios de Jacob.
Salmos 46:7
A las montañas levanto mis ojos; ¿de dónde ha de venir mi ayuda? Mi ayuda proviene del Señor, creador del cielo y de la tierra.
Salmos 121:1-2
Pero los que confían en el Señor renovarán sus fuerzas; volarán como las águilas: correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán.
Isaías 40:31
Pero ahora, así dice el Señor, el que te creó, Jacob, el que te formó, Israel: No temas, que yo te he redimido; te he llamado por tu nombre; tú eres mío.
Isaías 43:1
Cuando cruces las aguas, yo estaré contigo; cuando cruces los ríos, no te cubrirán sus aguas; cuando camines por el fuego, no te quemarás ni te abrasarán las llamas.
Isaías 43:2
A cambio de ti entregaré hombres; ¡a cambio de tu vida entregaré pueblos! Porque te amo y eres ante mis ojos precioso y digno de honra.
Isaías 43:4
Así dice el Señor, el Señor Todopoderoso, rey y redentor de Israel: Yo soy el primero y el último; fuera de mí no hay otro dios.
Isaías 44:6
Soy yo mismo el que los consuela. ¿Quién eres tú, que temes a los hombres, a simples mortales, que no son más que hierba?
Isaías 51:12
No le temas a nadie, que yo estoy contigo para librarte». Lo afirma el Señor.
Jeremías 1:8
Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso.
Mateo 11:28
La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustien ni se acobarden.
Juan 14:27
Si fueran del mundo, el mundo los amaría como a los suyos. Pero ustedes no son del mundo, sino que yo los he escogido de entre el mundo. Por eso el mundo los aborrece.
Juan 15:19
Yo les he dicho estas cosas para que en mí hallen paz. En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo.
Juan 16:33
¿Qué diremos frente a esto? Si Dios está de nuestra parte, ¿quién puede estar en contra nuestra?
Romanos 8:31
Sin embargo, en todo esto somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
Romanos 8:37
Manténganse alerta; permanezcan firmes en la fe; sean valientes y fuertes.
1 Corintios 16:13
Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.
Filipenses 4:13
Pues Dios no nos ha dado un espíritu de timidez, sino de poder, de amor y de dominio propio.
2 Timoteo 1:7
Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes.
1 Pedro 5:7
Ustedes, queridos hijos, son de Dios y han vencido a esos falsos profetas, porque el que está en ustedes es más poderoso que el que está en el mundo.
1 Juan 4:4
Porque todo el que ha nacido de Dios vence al mundo. Esta es la victoria que vence al mundo: nuestra fe.
1 Juan 5:4
Ya no sufrirán hambre ni sed. No los abatirá el sol ni ningún calor abrasador. Porque el Cordero que está en el trono los pastoreará y los guiará a fuentes de agua viva; y Dios les enjugará toda lágrima de sus ojos.
Apocalipsis 7:16-17